Gallinero ( relato de Enero #OrigiReto2019)
El Origireto es una genial iniciativa de Stiby y de Katty. Las normas de este reto se pueden consultar en las bitácoras de las organizadoras, @stiby2 y @musajue:
http://plumakatty.blogspot.com/2018/12/origireto-creativo-edicion-2019.htmlhttp://plumakatty.blogspot.com/2018/12/origireto-creativo-edicion-2019.htmlo enhttp://nosoyadictaaloslibros.blogspot.com/2018/12/reto-de-escritura-2019-origireto.html. Como he llegado tarde a esta aventura, tengo que recuperar.Este es el relato correspondiente al mes de Enero, y para rizar el rizzo lo he intentado hacer en verso, a ver si os hace más gracia :
GALLINERO
Era una vez, en enero
un hermoso gallinero
donde vivía Facunda
la gallina furibunda,
con su extraña amiga Lola
que no quería estar sola
y su enemiga Cristina,
estirada y muy, muy fina.
Además vivía un gallo
altanero y muy gallardo,
de colores su plumaje
y con cara de malaje.
Lola, pequeña y salada
jugar mucho la gustaba,
sonreír con alegría
y disfrutar cada día.
Ella nunca se alejaba
de Facunda, pues la amaba.
Mas Facunda era envidiosa,
mala y rastrera… espantosa.
Al gallo no le importaba
que hasta le plantara cara.
Eran tan siesa y tan rara
que no había quien la mirara.
Tenía tan mal humor
que nunca jamás dio amor,
y era más desagradable
que un gran frasco de jarabe.
Aún así Lola sentía
que a ella la seducía
aunque nadie se creía
que algún día la querría.
pero Lola aseguraba
que ella sí, que ella la amaba
y que Facunda, seguro
la amaba en lo más profundo.
Cristina se maquillaba
se peinaba y se arreglaba
y salía a dar paseos
por todito el gallinero.
Tenía enamorado al gallo
y también intimidado
pues jamás se la movía
una pluma, ningún día.
Se mantenía impoluta,
elegante y resoluta
como una mujer fatal
queriendo aparentar.
Cristina todos los días
divertida, las veía:
Lola intentando abrazar
a Facunda en cualquier lugar
mientras Facunda la huía
y malas caras ponía.
Pero Lola no cejaba
en su empeño, pues la amaba.
Facunda no se cansaba
de esquivarla “¡Qué pesada!
Esta gallina cansina
me está alegrando la vida
pues cuando viene me largo
y si está ahí, paso de largo.
El caso es no hacerla caso
y que vea que la rechazo,
para que no se confíe
y de mi amor no se fíe,
así siempre la tendré
a mi verá, y la amaré.”
Porque con mucho respeto
la amaba mucho en secreto.
Entretanto Cristinita
se sentía, gallinita,
de lo más afortunada
y siempre, muy arreglada
miraditas cosechaba
mientras se pavoneaba.
A todas intimidaba
con su cresta repeinada
y nadie la saludaba
porque hasta miedo las daba.
Se paseaba glamurosa
frente al gallo deseosa
de que el kiriko la amara
y algún día se declarara.
Cuando veía a Cristina
el gallo no se movía,
porque se sentía pequeño
ante tan gran desempeño
que adornos y fruslerías
otorgaban a Cristina.
Cristina veía a Lola
que casi nunca iba sola
siguiendo a Facunda iba
día tras día tras día.
Aún así no comprendía
por qué Lola sonreía
mientras Facunda corría
y de ella se reía.
Y tampoco comprendía
porque ella no la atraía
si era gallina preciosa,
blanca, pura y suntuosa.
Porque Cristina era hermosa
y también muy vanidosa,
mientras Facunda, enojada,
era fea y mal encarada.
Con un ojo retorcido,
plumaje descolorido,
cresta rala y despeinada
y toda ella descuidada.
Lola caso no la hacía
a Cristina, ningún día
aunque fuera más pintada
que una avestruz disecada.
Fingía que no la importaba,
Cristina, mientras lloraba
a escondidas, de la envidia
cuando nadie la veía.
Porque Cristina en el fondo
de su corazón, muy hondo
quería que la quisieran,
la miraran y siguieran,
la abrazaran y besaran
y hasta que la despeinaran.
Pero no valía cualquiera
para esa gallina fiera
debía ser el Kiriko:
el más apuesto gallito.
Cual princesa, deseaba
que le gallo se declarara
y le pidiera su mano
al gallo flaco, su hermano.
Asi podría casarse
pues era tradicional
no como Facunda y Lola,
aquello no era normal.
Cristi decía que Lola
acabaría muy sola
si seguía con Facunda,
que la odiaba, furibunda.
Mas Cristina no sabía
que en el fondo la quería.
Facunda a Lola, a su modo
la quería mucho, del todo.
Pero jugaba a su juego
del “te esquivo y no te quiero”,
mientras Lola divertida
vivía feliz su vida.
Y es que todos los amores
no son iguales, señores.
Porque caricias y abrazos
no son todo en todos los casos.
También valen miraditas
y picotazos y risas
jueguecitos de rechazos,
carreras y encontronazos
y miradas intrigantes,
profundas y penetrantes
que te traspasan el alma
y el bazo y hasta la barba.
También cuentan los morritos
que acaban poniendo ojitos.
Y hasta la indiferencia
contaría en la pendencia
del amor correspondido,
(sea cual sea el contenido).
Cuando lo entendió Cristina,
la gallina filipina
era tarde, demasiado
para buscar un amado
que quisiera acariciarla,
achucharla y despeinarla.
Porque con tanta elegancia
había marcado distancias.
Y a Kirico intimidaba
cada vez con su midada,
por eso el gallo altanero
no se quitaba el sombrero
ante tan hermosas plumas
(como decían algunas)
Pues sentirse rechazado
no era plato de su agrado
y es lo que hacía día a día
esa gallina, Cristina.
Así que el pollo pensaba
que ella no, que no lo amaba
y del medio se quitaba
cada vez que ella pasaba.
Aquel amor imposible,
deseado y muy factible
no llegó a ser declarado
a Cristina por el gallo.
Y ella, gallina peinada
tampoco hizo nunca nada
por dar un paso hacia el gallo
que miraba de soslayo,
cada vez que la veía
y el pico se le encogía.
Así pues acabó sola
Cristinita y no Lola.
No Facunda, la horrorosa,
sino Cristina, la hermosa.
Al final Lola y Facunda
se querían como nunca.
Mientras Cristina lloraba
porque nadie la adoraba.
Tan altiva la veían
que ni a consolarla acudían
ni gallinas, ni Kirico,
ni el perro pastor, Perico.
Tantas lágrimas vertió
que del todo se secó
Se le cayeron las plumas
y no le quedó ninguna.
La crestá se la torció
y el corazón se rompió.
Y pasó de ser gallina,
altanera y ultrafina
a ser raspa, a ser espina,
a ser un ser que no siente
un espiritu inconsciente.
Un recipiente vacío
a ser nadie entre el gentío.
a ser maceta de hiedra
a ser estatua de piedra.
Asi que nunca olvideis
que el amor es infinito
que a veces no lo creeis
y quereis normalizarlo
pero debeis respetarlo
porque cada uno que veis
es distinto, es lo bonito.
Este relato está enmarcado en el Reto de escritura de #OrigiReto2019.
· Objetivo 10:Crea una fábula (cuento con moraleja en el que los personajes deben ser animales)
· Objeto oculto: nº14: Un avestruz disecado.
· Objeto oculto: nº36: Una estatua de piedra.
· Palabras:1001 (milpalabrista)·
Además: 5/6 para feminista y no estoy segura de si supera el test de Bechdel, alguien debería dejar su opinión en comentarios. Y por si fuera poco me he estado comiendo el tarro para hacerlo todo en rima consonante, aunque alguna se me ha escapado, creo que eso merece un comentario, como mínimo.
Hola!:
ResponderEliminarMuy gracioso xD se lee rápido pero te ha tenido que llevar tu tiempo, ¿no? A mí me parece súper difícil hacer una historia así, que tenga sentido, sea divertida y que rime xD.
Me ha gustado que Lola y Facunda terminaran juntas, y lo de que el amor también son picotazos jajaj.
Nos leemos Yarcko :) y por cierto lo estás haciendo genial recuperando todos los relatos en estos pocos meses :)
Hola!!
ResponderEliminar¡Bienvenida por aquí! Me alegra que te haya divertido la historia, la verdad es que si que me llevó su poquito de curro, pero la escritura es así, a veces sale sola y a veces...(un momento ¿cuando sale sola?) humm!
Muchas gracias por pasarte y comentar y muchas gracias por los animines, me falta mucho que recuperar y poco tiempo para hacerlo, pero mola el buen rollo que hay en el reto ¡Eso siempre motiva!
Nos leemos :)
¡Muy buenas!
ResponderEliminarQué gracioso así escrito en verso, aunque yo también lo hice de esta manera pero parafraseando en lugar de poner versos como tales.
Me ha gustado la enseñanza de la fábula y que hayas conservado el ritmo infantil pero con enseñanza, al igual que poner gallinas como personajes. Si acaso me ha sonado raro un punto en que dices "dar abrazos" o algo así porque no me imaginaba a una gallina abrazando a nadie sos jajaja.
Me quedo sobre todo con este párrafo:
Y es que todos los amores
no son iguales, señores.
Porque caricias y abrazos
no son todo en todos los casos.
Creo que este contiene la moraleja, muy buena.
Un abrazote y enhorabuena.
¡Hola!
EliminarMe alegra que te haya divertido, al final las fábulas son para eso ¿no? Y si, las rimas a veces te llevan a que las gallinas tengan que dar abrazos para conservar la consonancia, así de paso queda en entredicho la cordura... en fin.
Bien detectada la moraleja, aunque la repito al final de otro modo, pero iba ahí desde el principio.
Muchas gracias por pasarte y comentar.
Besicos!
Realmente bueno, últimamente estoy familiarizado con cuentos para niños y solo le falta la ilustración, ágil, divertido y encima rima,y te digo sin grima , me encanta que la protagonista sea una gallina. Muy buena la moraleja. Estás lanzada.
ResponderEliminar¿Siempre es un placer verte por aquí! Me hace mucha ilusión que te haya gustado y hayas valorado la moraleja.
EliminarUn besote!
Madre mía, vaya esfuerzo titánico has tenido que hacer para llegar a mil palabras con versos cortos. Enhorabuena, no sé si te llevarás una gamba pero la próxima vez que nos veamos te invito a unas patatas fritas o algo :-P. Me ha recordado a la gran Gloria Fuertes. Lo mejor, sin duda, la moraleja, como recalcó Stiby. Felicidades.
ResponderEliminarHola Kalen! Que alegría que hayas sacado un ratejo para leerme! La verdad es que si que le di vueltas y revueltas para sacar una buena ristra de versos y que la historia tuviera sentido y fuera fácil de entender y divertida de leer. La verdad es que seguí un consejo que me dio una vez un amigo: que para escribir, le echara morro. No es muy poético pero es verdad, a veces hay que tirar para adelante y parecerse a Gloria Fuertes (ojalá...). Mucgas gracias por tu comentario tan valeroso. Besicos
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